Un sistema de producción de semilla prebásica en el caso de la papa, es a partir de plántulas procedentes de material parental de origen comprobado y multiplicadas in vitro. Se denomina semilla genética o prebásica a los primeros tubérculos obtenidos de las pequeñas plántulas in vitro.
El tubérculos-semilla categoría prebásica, se obtiene a partir del clon seleccionado, utilizando técnicas de cultivo in vitro y micropropagación, las cuales aceleran el proceso de producción y aseguran materiales libres de patógenos, condición esencial para el éxito de cualquier programa de producción de semillas. La calidad de semilla prebásica, incluye tanto el grado de sanidad como su estado fisiológico, por consiguiente, es necesario tomar todas la medidas posibles de protección durante la cosecha, la clasificación y el almacenamiento, con el fin de mantener al máximo el potencial de rendimiento de la semilla. Para la producción de semilla prebásica de papa, se establece que existen alternativas o métodos de producción: continua y estacional. Las áreas con climas rigurosos y marcados obligan a emplear un sistema de producción estacional es decir uno o dos cultivos al año.
Cultivo de tejidos vegetales in vitro, significa cultivo in vitro de células, tejidos u órganos colocada sobre un medio nutritivo artificial en un recipiente generalmente de vidrio bajo condiciones estériles y ambientales controladas. El cultivo de tejidos vegetales es el proceso que consiste en el empleo de técnicas para el crecimiento y desarrollo de tejidos y células, para obtener plantas nuevas cultivadas en medio de cultivo sólido y aséptico, para ser utilizados en la conservación de recursos genéticos en forma clonal. Clon representa una generación de plantas derivadas asexualmente a partir de un solo individuo, por medio de cortes, multiplicación in vitro, etc. conteniendo una genética a los progenitores. La propagación clonal in vitro permite obtener plantas homogéneas, en mayor cantidad y libres de patógenos; además en cultivo de papa permite generar vitroplantas nuevas en un corto tiempo.
Mediante el cultivo in vitro de tejidos vegetales, es posible cultivar plantas completas, a partir de partes de estas o incluso de células aisladas en un medio de cultivo estéril. Manteniendo éstas en medios que contengan minerales, factores de crecimiento, una fuente de carbono y reguladores de crecimiento. El cultivo de tejidos actualmente se constituye en una alternativa de producción de material de alta calidad genético-sanitaria, por las múltiples ventajas que ofrece, a saber: obtención de grandes volúmenes de producción a partir de poco material vegetal al inicio, en períodos cortos y superficiales reducidas, alta calidad sanitaria del material, incremento de los rendimientos por utilizar material saneado y rejuvenilizado, material disponible en cualquier época del año, facilidad de transporte e intercambio de material a nivel nacional e internacional.
La papa, Solanum tuberosum sp. L., es un tubérculo nativa de la Cordillera Andina de Sur América, cuyo origen se ubica entre las regiones de Perú y Bolivia. La producción de papa es importante debido a que genera una actividad económica importante por las propiedades alimenticias que tiene tanto en proteínas, carbohidratos, minerales y otros. Además es un cultivo de importancia económica tanto en sus lugares de origen como en muchos otros países a nivel global tan solo en su biodiversidad tanto en México como en el resto del mundo.
El nivel de producción los diferentes problemas como; enfermedades, plagas, limitada tecnología de producción, empleo de semilla degenerada –acumulación sistemática de virus, viroides, fitoplasmas, etc.– y otros como riesgos ambientales que ocasionan pérdidas de cosecha por principales amenazas: granizo, heladas, inundación y sequía.
Actualmente el problema de la semilla se puede resolver por diferentes técnicas, una de las mejores, es por técnicas de cultivo de tejidos in vitro para lo cual se realiza en un sistema de producción “in vitro – invernadero – campo” generando semilla certificada. Este sistema es efectivo en cuanto a la calidad de semilla producida.
Cuidados en la aclimatación de tubérculo-semilla
En la propagación in vitro de la papa para la obtención de tubérculos sanos para ser usados como semillas, el sistema consiste en subcultivar secciones nodales en el laboratorio de cultivo in vitro, con el objetivo de multiplicar masivamente vitroplantas libres de patógenos, que sirven como plantas madre para la producción de semilla prebásica. Estos constituyen el material inicial, el cual es multiplicado sucesivamente en campo por los agricultores, en el proceso de producción de semilla certificada.
Dentro de una estructura con cubierta transparente, en la que es posible mantener un ambiente más o menos controlado con relación a la temperatura, humedad y energía radiante, para proseguir un adelanto o retraso en las cosechas, proteger los cultivos y hacer un mejor uso del agua, el período de adaptación de las plántulas in vitro al nuevo hábitat es llamado fase ó etapa de aclimatación. La aclimatación de vitroplantas en invernadero significa de in vitro a ex vitro, de condiciones heterótrofas a autótrofas, de laboratorio a campo. Al respecto se debe tener los siguientes cuidados en la aclimatación:
En el manejo del invernadero la planta de papa necesita de luz, agua, aire y humedad para crecer normalmente, por ello es importante mantener un equilibrio entre estos elementos dentro del mismo. Son tres los elementos que deben tomarse en cuenta:
El uso de buena semilla con genotipos de papa según las necesidades incrementará a mediano plazo la producción y productividad
El valor comercial de la cosechas así como su destino final –ya sea para industria o para consumo– determinan la selección de los genotipos.
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